jueves, 21 de mayo de 2015

PUNTO B

                                                                  LA RELIGION MUISCA


Al principio todo era oscuridad. La luz, que estaba "metida allá", comenzó a salir para iluminar el universo.Ese poder creador infundía su cualidad luminosa como atributo lúcido y resplandeciente a las cosas.
La esencia creadora, denominada Chiminigagua, tenía la luz en sí.
Representaban en los astros la diferencia y complementariedad de los géneros, el Sol (Sua) era masculino y la Luna (Chía) femenina. Simbolizaban la articulación del matrimonio como conjunción del poder inseminador de la luz del día y de la noche, y los concebían como "padres de la gente".
Bachué emergió de la Laguna de Iguaque, con su hijo en brazos, este al crecer fue su esposo, y su progenie pobló la tierra.

Pronto los muiscas olvidaron a sus dioses, pasaban en día en holganza y vicio. Entonces Chiminigagua envió un mensajero: Bochica quien como una encarnaciónsolar apareció por el oriente de la sabana de Bogotá.
Chibchacum, enojado por la maldad de los seres humanos, había provocado una inundación juntando las aguas de los ríos Tibitó y Sopó, provocando la destrucción de los cultivos, con la consencuente hambruna. Bochica arrojó contra las peñas su vara de oro, separó la sierra, y desagotó la sabana creando elSalto de Tequendama.
Entonces desde el valle sagrado de Iraca, con el nombre de Idacanzas predicó y enseñó las buenas costumbres y algunos preceptos morales. El civilizador enseñó a sembrar, a fabricar casas, a tejer en algodón y el fique, a cocer el barro y hacer ollas, la manera de calcular el tiempo y determinar las fechas para la siembra y la recolección. Los muiscas le distinguían como "nuestro pariente y padre".

Consideraban que los espíritus estaban vinculados con su geografía: ríos, montañas y lagunas, las últimas eran centros ceremoniales, a los que se hacían ofrendas para mejorar la pesca.

Sacerdotes y señores

Los sacerdotes muiscas, llamados "jeques" se educaban durante 12 años en "Los Cucas", seminarios dirigidos por ancianos. Eran los responsables de dirigir las ceremonias religiosas.
Los soberanos muiscas pretendían descender de divinidades astrales. El Zaque, encarnaba a Sua, y el Zipa a Chía, eran venerados como si realmente se tratase de dioses. Ejercían un poder principalmente de carácter temporal, sin embargo el protocolo estaba basado en la religión. ¡Desgraciado el individuo que osase mirar, cara a cara, a un príncipe! Un temor supersticioso impedía a los muiscas cometer tal delito, que a sus ojos hubiese podido trastornar el orden del mundo.

 Templos

Los templos muiscas eran lugares sagrados presididos por el Jeque (sacerdote), donde acudían hombres y mujeres para hacer sus ofrendas y solicitar favores. También eran sitios de enterramiento de Jeques y Caciques principales; así mismo las"Cucas" o seminarios donde se impartía instrucción a los futuros jeques, caciques y capitanes; probablemente también lo fueron los observatorios astronómicos.

Teogonía de los Dioses Chibchas
PUNTO A

                                                                   EL IDIOMA MUISCA


El idioma muisca o chibcha ,es una lengua extinta perteneciente al subgrupo magdalénico de la familia lingüística chibchense que fue hablada en el actual territorio del altiplano cundiboyacense. Debido al gran número de sus hablantes, en 1580 fue declarada Lengua General del Nuevo Reino de Granada. Se crearon cátedras de Lengua General en Santa Fe donde  se enseñaba el idioma muisca a los sacerdotes que  debían evangelizar a los indígenas de los «valles de Bogotá y Tunja», epicentros de sus dos principales dialectos. El idioma muisca es conocido gracias a las crónicas y las "fuentes primarias de la lengua muisca", cinco documentos de corte lingüístico elaborados a finales del siglo XVI y comienzos del siglo XVII por misioneros de las órdenes dominica y agustiniana con el único interés de evangelizar a los indígenas muiscas.
Estas actividades estimularon la elaboración de gramáticas, catecismos y vocabularios, unos inéditos y otros publicados, que hicieron pasar el idioma muisca de lengua ágrafa a lengua escrita, lo que permitió a filólogos y linguistas del siglo XIX acercarse al conocimiento de dicha lengua, extinguida oficialmente a raíz de la Real Cédula de Carlos III que ordenó el 16 de abril de 1770 la enseñanza del castellano como lengua oficial del Imperio. Sin embargo, desde mucho antes el idioma muisca había dejado de hablarse en algunos lugares del altiplano, como prueba el hecho de que en Tabio, el 17 de marzo de 1751, el Fiscal Protector don Juan Antonio Peñalver inició visita a dicho municipio y a su agregado Subachoque, pregonando en la plaza «por voz de lengua española por no hablarse ya la de los indios.